Todos sabemos que la belleza es un asunto muy personal y diferente en cada persona. La belleza de los muebles antiguos es un asunto aún más complicado, porque tiene un factor destacado y diferente que la pintura, y está más relacionado con la escultura,  porque a fin de cuentas los muebles antiguos son “esculturas que se pueden admirar y también usar”. Este factor primordial son las “proporciones“. Proporciones son mucho más importantes que las tallas o la marquetería o cualquier otro adorno en un mueble. Imagino que habrán visto muebles antiguos que se han vendido por unos precios estratosféricos aunque sus proporciones son absurdas, con unas patas grotescas, o demasiado largos etc.  Hay casos que el valor histórico, la procedencia o escasez de un mueble antiguo obliga al mercado a no prestar atención en las proporciones.

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